Este es tu silencio. Todos los silencios
son tu silencio. Aquí descansa la paz
sobre la paz.

Hojas que caen, sol que se pone, moras
y hojas entre las hojas, espigas y juncos
en su constante alabanza, tan clara
como áspera la hoja de hierba que esa
capa inferior de susurros ciegos, cuando caes
diciendo adiós a todo y la tierra te devuelve
su incomprensible maraña vegetal,

Las puertas cerrada de las casas,
sin que nadie proclame
lo que allí se ama,
lo que allí se honra.

Cualquier gesto revela, lo que al instante
se oculta arrancado por una necesidad impuesta
en la que nada sirve esa alma tuya
que todo lo que conoce. Nada depende
de algo a cuyos ojos miraste un momento.

Y no puedes, ya no puedes, decirlo todo.

la dicha de carecer para tener. Podríamos
haber tomado tantas formas. La imagen de la vida
su espejismo: el de las formas sentidas,
las formas aceptadas. Lo desconocido en ti
como una jaula de fuego. Sentir no es sentir
si no se rompen los moldes del sentimiento.

Conocer lo desconocido
a través de su presencia sin límite.
… como vuelan las noches
sobre el nido de la luz cuando la música
transforma la alegría salvaje en conocida
comprendes que lo que te libera
es lo que te doma.

Pero todo el mundo se parece a ti.

Eres lo que une todo.